¿Por qué las mamás necesitan la música de Mozart?

1. La música de Mozart, por lo cual se lo llama EFECTO MOZART causa múltiples efectos positivos en los bebés y en los niños. Entre ellos la capacidad de relajarlos y conseguir que descansen durmiendo plácidamente.
2. Las combinaciones musicales creadas por Mozart, sus frecuencias, su métrica y su tono estimulan el cerebro humano reduciendo el estrés y consiguiendo que los bebés y los niños se calmen.
3. Esto ayuda y mucho a que puedan conciliar el sueño con mayor facilidad, sobre todo cuando están muy alterados o nerviosos.
4. Al mismo tiempo escuchar la música de Mozart en edades tempranas contribuye a activar nuestras neuronas, lo cual favorecería nuestro desarrollo no sólo intelectual sino también creativo y cognitivo.
5. Consigue que los más pequeños mejoren tanto su atención, como su concentración y sus habilidades de comprensión.
6. El efecto Mozart ayuda a desarrollar sus emociones y sentimientos, favoreciendo su atención y concentración, estimulando su memoria y su creatividad.

¿Como asegurarme como madre que mi hijo pueda obtener todos estos beneficios y estímulos del Efecto Mozart y, que la hora de dormir de mi bebe no sea solo descansar el cuerpo?

Una excelente combinación con los beneficios que otorga esta música sobre todo los primeros meses de vida es la Shantala para bebés.

¿Qué es Shantala para bebes?

Shantala para bebés es una tradición milenaria con múltiples beneficios

Esta tradicional práctica hindú fomenta conexión entre la mamá y el bebé, desde los primeros meses de vida tiene múltiples beneficios para la salud; es una forma simple y comprometida de generar contacto y estímulo.

El Shantala es una técnica de masajes oriunda de la India, tiene más de 5000 años de historia y se desprende de la medicina Ayurveda.

Llegó a nosotros gracias al obstetra francés Frédérick Leboyer, quien iba caminando por las calles de Calcuta (India) y se detuvo al ver a una mamá sentada en la vereda, con las piernas estiradas y masajeando a su bebé sobre ellas.

Frederik Se quedó encantando con el nivel de conexión y de amor que ese contacto producía, y alcanzó a entender que el masaje era un recurso que fomentaba la conexión con la mamá y la salud. El nombre de esa mamá era “Shantala”, al igual que el del libro –hermoso y poético- que le sirvió para traer esta técnica a Occidente en los años ’70: Shantala, el arte tradicional del masaje para bebés fue el texto que diseminó los principios de la práctica en todo el mundo.

¿Para qué sirve el Shantala y porque como madre no puedo obviar su aplicación en mi bebé?

1. El primer objetivo del masaje es brindar al bebé que nace una buena transición entre el ambiente materno y el mundo exterior. El masaje lo va a ayudar a desarrollar funciones que el bebé necesita para desenvolverse. Finalmente, será un espacio de juego y encuentro entre él y su madre. El calor y olor de la mamá son la base de la salud. Mediante el tacto transmitimos nuestro amor más profundo.
2. Esta técnica presenta múltiples beneficios, podemos destacar que favorece la conexión madre e hijo, mejora el sueño, reduce los cólicos, modula la circulación, tonifica y relaja los músculos. Además, fortalece el sistema inmune, flexibiliza la columna, aumenta la concentración, restablece el equilibrio energético, mejora la maduración y la seguridad en sí mismo, disminuye la ansiedad, el dolor y el umbral de sensibilidad. Es muy beneficioso en bebés prematuros, con parálisis cerebral y autismo.
3. El Shantala lo da la madre, el padre, una abuela o algún familiar allegado al bebé. Es una técnica que se practica –idealmente- todos los días desde el nacimiento hasta los ocho meses (momento en el cual el bebé transita la angustia del octavo mes). Luego de este tiempo se brindan otro tipo de masajes incluidos.

¿Desde cuándo lo puedo aplicar?

Se puede hacer ni bien nace, con la salvedad de que en el primer mes de vida no se recomienda utilizar ningún aceite. Luego de los primeros 2 o 3 meses ya se puede incluir la aplicación de Aceites Esenciales que hagan para el bebe una experiencia de relajación sensorial y estimulo completo. Cuanto antes se practique mejor, porque el bebé tiene que aprender a recibirlo, sino después ya es un poco tarde.

Se aconseja utilizar aceites vegetales para masajear al bebé, como por ejemplo el aceite de almendras, coco, sésamo, etc. una muy buena opción son los aceites esenciales doTERRA con sus múltiples bebeficios combinado con aceite de coco fraccionado para esta actividad. Los aceites vegetales restauran la humedad de la piel, fortalecen los huesos, nutren los tejidos y mantienen el cuerpo y piel flexible. Según las características del bebé se elige uno u otro aceite (no todos tienen los mismos beneficios). El masaje se puede realizar al aire libre o en una habitación. Se aconseja realizarlo por la mañana y repetirlo al anochecer, antes del sueño. Si no se puede, en cualquier momento.

El tiempo recomendado es de cinco minutos a media hora. La posición ideal es que la madre se siente en el suelo, con las piernas estiradas, espalda recta y hombros relajados. Masajear al bebé encima de una mesa no se aconseja, eso hará perder los beneficios del masaje.

La secuencia del masaje es tórax, brazos y manos, abdomen, piernas y pies, espalda, cara, tres ejercicios de yoga y baño con agua tibia. ¡El bebé estará feliz y su mamá también! Es un momento único del día donde el lenguaje traspasa las palabras. El diálogo fluye a través de la mirada, tacto, caricias, aromas. El masaje Shantala es un regalo invaluable.

Los cinco sentidos del bebé son uno sólo, todos ellos son inicialmente una extensión de su piel.
Son los dedos del cerebro, sintiendo, explorando el mundo exterior… y todo comienza con el tacto.
Ser tocado y acariciado, ser masajeado, es alimento para el bebé.
Alimento tan necesario como los minerales, vitaminas y proteínas.
Y fusionar esta técnica con música estimulante y aplicarla como un todo unificado incluido la hora del baño le da al bebé estimulo relajación fortalece la relación con su mama y desde temprana edad se desarrollan cualidades que en el futuro le serán útiles para el día a día, sumado a una experiencia sensorial satisfactoria tanto para bebé como mamá.

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